martes, 20 de mayo de 2008

Cienciano fue derrotado 1 a 0 frente a Sporting Cristal

Jesús, el salvador. Se llama Jesús Cabrera, tiene 18 años y sólo tres partidos en Primera División y quiere mandar al trasto esa máxima que dice que los “jóvenes ganan partidos pero los viejos los campeonatos”. Fue la gran aparición celeste ayer en el estadio San Martín para batir a un Cienciano desgastado por sus yerros y por sus achaques (ojo que su equipo tiene de promedio 27 años de edad).

A los 80 minutos, Cabrera acabó con las angustias de los hinchas y de Juan Carlos Oblitas quien la pasaba entre muecas nerviosas y gritos ariscos. Villalta fue hasta el ataque y en el centro del área se disfrazó de Cristiano Ronaldo para romperle la cintura a Marengo y ceder a la derecha para el ingreso de Jesús quien se la metió entre las piernas de “Chiquito” Flores.

Después ocurrió el despelote. A los 82 y 84 minutos, Julio García y Manuel Marengo fueron expulsados. Más que faltas innecesarias, fueron dos actos para escaparse del partido. Esas tarjetas rojas se sumaron a la de Daniel Peláez a los 76 minutos (le metió un cabezazo a Cabrera), todo para que en el resumen general del partido se diga que Cristal le ganó a un Cienciano que jugó con ocho hombres.

Ya al final, Juvenal Silva, Corcuera, “Pincel” García y todo aquel vestido de rojo disparó sus ayayays contra el árbitro. Le dieron duro. Si estos personajes hubieran sido justos se la hubieran agarrado contra sus delanteros que ayer fallaron clamorosamente y dejaron al Papá virtualmente eliminado en la lucha por el título del Apertura.

Si esos atacantes hubieran tenido precisión en el remate final, Cienciano ganaba fácil.

En el primer tiempo, Sawa la mandó por arriba cuando estaba solo y Vassallo no saltó a cabecear un preciso centro de Julio García.

Lo del segundo tiempo ya fue de escándalo. Su tuviéramos mala leche hubiéramos dicho que Sawa no la quería meter ante su ex club. A los 51’, 54’ y 58’ el japonés remató alto, tiró débil y no acertó ante buena atajada de Heredia. De esos errores el presidente rojo Juvenal Silva no dijo nada. Hizo lo más fácil, como siempre, criticar al árbitro.

Cristal ganó a lo Cristal. Concretó una de de sus dos únicas ocasiones. Con su fútbol amarrete, apático y sin luces, metió a Cienciano en su arco en los últimos minutos del partido y disputa el título con los cremas. Deben agradecerle a Jesús y ponerse de rodillas.



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